Todo estaba escrito, el destino placentero parece confabularse con el barrio de 2 de Mayo, el nunca darse por vencido también es un plus que funciona perfectamente en el Juventud Barranco, fue un triunfo con dedicatoria al papá Hugo Echegaray, el licenciado andaba un poco mal de salud, pero ya está en pie y estará junto a Daniel Ruiz para asegurar la clasificación a sus próximos objetivos.
Todos buscan a Linares, autor del gol vitartino.
Un primer tiempo muy parecido al del encuentro entre ambos cuando lidiaron en la fase de grupos, Juventud Barranco tratando de sostener los embates del Tornado para contragolpearlo, pero la presión de la oncena local se acentuaba porque los huachanos presionaban muy pegado de su área, muy cerca al meta Juan Soto y fue así como llegaría la inauguración del score; sobre los 26’, un típico centro al área del Tornado provocó el descontrol defensivo del Barranco y el mal rechazo de Juan dejó el balón a merced de la testa de Ernesto Linares, el mediocampista vitartino conecta el cabezazo a valla desguarnecida y provoca el estallido del Andrés Bedoya; el 1 a 0 caía de maduro, Barranco aguantó el primer cuarto de hora, lo restante fue de entera presión local; Tornado suele coaccionar a sus rivales en los primeros 45, la otra fracción es muy distinta y así sucedió…
INCREÍBLE. Ramírez refleja el pesar del Tornado, tras el autogol de Cobos.
REMONTADA ESPECTACULAR
Los bravos se iban al descanso, logré escuchar claramente a Víctor Reyes cuando se dirigía a sus pupilos: “Ellos querrán encimarnos, dejarán espacios, vamos a contragolpearlos y matarlos, está manejable…”, la confianza se reflejaba en el verbo de Reyes, la gente de Ate en las tribunas vociferaba una goleada.
Al frente se encontraba Daniel Ruiz, el estratega del barranquito y decía ante los rostros contrariados y cabizbajos de sus muchachos: “Este equipo ya se cansó, nosotros tenemos más físico y mejor fútbol, carajo, aprovechemos esa condición, no nos ganan muchachos, no nos ganan…”, esa dosis y otras más con la energía típica del “Chino” Ruiz levantaron los ánimos de los “Danielitos”; y cual bien estudiado libreto, muy rápido llega la bendición desde el cielo, minuto 3 del complemento, Yances lucha un balón en el medio campo, cede en profundidad para el “Mudo” Benítez, este no pudo llegar a tiempo, el defensa Marcos Cobos controla el esférico y con total confianza cede el pase a su portero Joel Silva, el meta ante la presión de Benítez decide despejarla en primera, pero desde el firmamento llegaba la ayudita, el balón hace un extraño a pocos centímetros de la pierna derecha de Silva y se le escurre, la pelota iba buscando el destino de la red, fue drámtico para los del Tornado, glorioso para el Barranco, gol, 1 a 1 y el Mudo sólo reía, no hablaba, era inexplicable, Elder Lino levantó la mirada agradeciendo al cielo y Yances cargaba en hombros al ralito “Borrego” Gonzáles frente a la oriente donde los hinchas azulgranas se rompían las gargantas…
Tras el autogol de Cobos, se desató la fiesta al pie de la barra, Yances cargaba al "Borrego"; Lino agradecía al cielo.
EL PEPE SE EQUIVOCÓ, GOLAZO
Si hasta ahí todo era felicidad para el Barranco, porque el empate era un gran negocio, lo que vendría a los 10 minutos sería sensacional; tiro de esquina azulgrana, José Yances, el encargado y dueño de los balones estáticos lo ubica en el punto del lado sur occidente, la clásica mano en la cintura y el respiro previo antes de pegarle al esférico no eran suficientes, el “Pepe” tenía en la mente una sorpresa, en la mirada su objetivo llamado: red; afila esa zurda prodigiosa y da el toque mortífero al esférico, la “vedette” del fútbol surca los aires ante la mirada pasmosa de los defensores y la pasividad del portero Silva, golazo por donde se le mire, no sólo era el 2 a 1 y a la postre definitivo, Barranco se cobraba la revancha, jugaba su segundo partido consecutivo fuera de casa y se iba con las maletas llenas, ahora tendrá que reeditarlo en su templo: el Segundo Aranda Torres, ahí estaremos.
La pelota ya se incrustó en el arco, era el golazo olímpico de Yances.
El Pepe sabe muy bien que tuvo una ayudita divina, era el 2 a 1 definitivo.
El match se jugó al límite, hubo de todo.
TORNADO FC (1)
Joel Silva; Walter Mogrovejo, Miguel Lavalle, Marco Cobos, Jaison Ramírez; Julián Liñan; Ernesto Linares, Shew Obregón, Edwin Solano; Luis Calle y Nelson Dávila. CambioS: Gian Rivera x Dávila,Máximo Beltrán x Ramírez y Carlos Villata x Solano.
DT: Víctor Reyes.
GOL: E. Linares (26’ PT)
JUVENTUD BARRANCO (2)
Juan Soto; Iván Lutgardo, Renzo Ruiz, Johans Hilario, José Ramos; César Jaimes, Elder Lino, Robert Vigil, José Yances; Frank Gonzáles y Segundo Benítez. CambioS: Jesús Espadín x S. Benítez.
DT: Daniel Ruiz.
GOLES: Marco Cobos (TOR) (3’ ST - autogol) y J. Yances (10’ ST)
La alegría era desbordante, por primera vez en su historia, Barranco llegaba a la final departamental.
EL INICIO. Yances remata cruzado y abre el score, la fiesta iba armándose.
SALUDO DE CAPITÁN. El 10 ah estado presente en goles decisivos.
DOMINIO. Hasta se atrevió a lucir piruetas.
GOLAZO. El tiro libre del sobrino del Maestrito "Ñol", Edwin Solano, enmudeció el Segundo Aranda Torrres.
La barra del Tornado también se hizo presente en gran número, Solano festeja con ellos.
Como todo partido de Copa Perú, el match fue trabado en ciertas ocasiones.
UFFF. Así se escucho en el coloso huachano cuando el balón pegó en el travesaño y la espalda de Soto, casi fue gol del Tornado.
MÁS QUE MIL PALABRAS. Así terminaron los del Tornado, con la desazón de la eliminación.
La numerosa hinchada del Barranquito celebrando el pase a la final.
El N° 1, LA DOCE, porsupuesto.
La otra N° 1, ¿Alguien tiene dudas de eso?... Ricuuraaa...
